Podemos hablar de nueva normalidad, pero ya dudo que el concepto de normalidad vuelva a ser el que conocíamos. El hecho de ir todo a peor se sobrelleva gracias a que los conciertos internacionales van volviendo y hay (muchas) ganas de volver al templo del punk en Catalunya: El Estraperlo badalonés. Allí andarán este viernes los australes The Rumjacks que sacaron un señor discazo (Hestia) en 2021 con nuevo cantante: Mike Rivkees.

Más allá de que Dropckick Murphys hayan devuelto a la primera línea el punk celta digamos que allí afuera hay muchísimas bandas de una calidad sobrada y que poco le tienen que envidiar a los de Boston. Si sois de los que han visto el videoclip de "An Irish Pub Song" ya sabéis de lo que os hablo: 79 millones de visionados en Youtube les contemplan…

El Estraperlo se convertirá en un pub irlandés y desde las antípodas los Rumjacks descargarán tonadas taberneras para una parroquia ávida de música en directo y desfase cervecil. Pero mi sorpresa es doble puesto que acabo de ver que van a estar apoyados por los Moscow Death Brigade, poseedores de una de las propuestas más inclasificables y atractivas de la actualidad. La noche será perfecta.

¡Pero hay más! Se unen dos bandas a la oferta badalonesa como son los vascos McOnak, practicando un folk rebelde y los vitorianos Perlata, practicando un punk rock agresivo. Vuelve el punk rock a nuestro día a día y lo hace en el añorado templo en el que pondremos en cuarentena a las mascarillas y la distancia social (siempre dentro de los límites de la ley). La normalidad no volverá, pero el punk rock vuelve este viernes.